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DE TRABAJADORES A PROVEEDORES

De trabajadores a proveedores. La responsabilidad social empresarial y la tercerización laboral en los ingenios azucareros

 

Resumen

Desde el análisis cualitativo, mediante entrevistas a profundidad a trabajadores, sindicalistas, profesionales, empresarios y actores claves de la industria azucarera, esta obra analiza los cambios en los tipos de contratación de los corteros de caña, avaladas por iniciativas legales, que han incidido en la precarización, la tercerización laboral y la fragmentación del colectivo de trabajadores. La adhesión al Pacto Global y la posterior publicación de informes anuales de sostenibilidad basados en los principios del GRI (Global Reporting Initiative), marcaron una nueva forma de relación entre los trabajadores y la patronal. Esto implicó, además, la revisión de antiguas ayudas sociales personalizadas y arbitrarias, manejadas por el patrón y la Iglesia; la instalación de nuevas áreas de bienestar social al interior de los ingenios; y la consecuente reorganización de la relación de los ingenios con sus colaboradores, proveedores, accionistas y la comunidad.

 

Palabras clave: Responsabilidad social de los negocios, derecho laboral, aspectos sociales, contratos de trabajo, trabajo y trabajadores, centrales azucareras, historia de Colombia.

 

 

From workers to suppliers. Corporate social responsibility and labor outsourcing in sugar mills

 

Abstract

Based on a qualitative analysis, using in-depth interviews with workers, trade unionists, professionals, businessmen, and other key actors of the sugar industry, this work analyzes changes in the form of hiring sugar cane cutters, backed by legal initiatives, which have influenced labor outsourcing, as well as the precariousness and fragmentation of the collective of workers. Adherence to the Global Compact and the subsequent publication of annual sustainability reports based on the principles of the Global Reporting Initiative (GRI) marked a new form of relationship between workers and employers. This also led to a revision of the old, personalized, and arbitrary form of social assistance, managed by the patron and the church; to the installation of new social welfare areas within the mills; and to a consequent reorganization of the relationship between mills and their collaborators, suppliers, shareholders, and community.

 

Keywords: Social responsibility of business, labor law, social aspects, employment contracts, work and workers, sugar plants, history of Colombia.

 

Citación sugerida / Suggested citation

Jiménez Nicholls, M. C. (2019). De trabajadores a proveedores. La responsabilidad social empresarial y la tercerización laboral en los ingenios azucareros. Bogotá, D. C.: Editorial Universidad del Rosario.

https://doi.org/10.12804/op9789587843217

DE TRABAJADORES A PROVEEDORES

La responsabilidad social empresarial y la tercerización laboral en los ingenios azucareros

 

MARÍA CAMILA JIMÉNEZ NICHOLLS

Jiménez Nicholls, María Camila

De trabajadores a proveedores. La responsabilidad social empresarial y la tercerización laboral en los ingenios azucareros / María Camila Jiménez Nicholls – Bogotá: Editorial Universidad del Rosario, 2019.

 

172 páginas.

Incluye referencias bibliográficas.

 

1. Responsabilidad social de los negocios – Historia – Colombia 2. Derecho laboral – Aspectos sociales 4. Contratos de trabajo – Aspectos sociales 5. Trabajo y trabajadores 6. Centrales azucareras – Historia – Colombia I. Universidad del Rosario II. Título III.

 

658.408 SCDD 20

 

Catalogación en la fuente – Universidad del Rosario. CRAI

 

SANN Junio 14 de 2019

 

Hecho el depósito legal que marca el Decreto 460 de 1995

 

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Opera Prima

 

©  Editorial Universidad del Rosario

©  Universidad del Rosario

©  María Camila Jiménez Nicholls

 

Editorial Universidad del Rosario

Carrera 7 Nº 12B-41, oficina 501

Teléfono 297 02 00, ext. 3112

editorial.urosario.edu.co

 

Primera edición: Bogotá D. C., octubre de 2019

 

ISBN: 978-958-784-320-0 (impreso)

ISBN: 978-958-784-321-7 (ePub)

ISBN: 978-958-784-322-4 (pdf)

DOI: https://doi.org/10.12804/op9789587843217

 

Coordinación editorial:  Editorial Universidad del Rosario

Corrección de estilo: Daniela Echeverry

Diseño de cubierta y diagramación:  Precolombi EU-David Reyes

Conversión sPub: Lápiz Blanco S.A.S

 

Hecho en Colombia
Made in Colombia

 

Los conceptos y opiniones de esta obra son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no comprometen a la Universidad ni sus políticas institucionales.

 

El contenido de este libro fue sometido al proceso de evaluación de pares, para garantizar los altos estándares académicos. Para conocer las políticas completas, visitar: editorial.urosario.edu.co

 

Todos los derechos reservados. Esta obra no puede ser reproducida sin el permiso previo por escrito de la Editorial Universidad del Rosario.

Contenido

 

 

 

 

Índice de abreviaturas

 

Introducción. El Valle del Cauca y la agroindustria de la caña de azúcar

Tercerización laboral y responsabilidad social empresarial. Contexto conceptual

Tercerización laboral: una manifestación de la precariedad laboral en América Latina

De paternalismo a responsabilidad social empresarial

Estado del arte

Metodología

 

Capítulo 1. Paternalismo y neoliberalismo: dos ejes para el análisis de las condiciones de vida y trabajo en los ingenios

1. Paternalismo como eje de análisis de la relación obrero-patronal y sus formas de contratación

2. Neoliberalismo como proyecto político y económico: nuevos cambios en las formas de relación obrero-patronales

 

Capítulo 2. Relaciones laborales: ingenios, sindicatos y corteros de caña

1. Construcción de narrativas de otredad e ingenios como agentes civilizatorios

2. De relación laboral a relación comercial: los ingenios y los corteros

2.1. Las distintas formas de contratación en el proceso de tercerización laboral, y los paros del 2005 y el 2008

2.2. El establecimiento de la relación comercial: Servicios de Cosecha Dorado y Centenario Corte

2.3. Pacto Global como respuesta a la crisis corteros-ingenios

3. Asociación colectiva o representación

 

Capítulo 3 Responsabilidad social empresarial

Conclusiones

Referencias

Autora

 

 

María Camila Jiménez Nicholls

Socióloga, egresada de la Universidad del Rosario. Desde hace dos años trabaja como asistente de investigación en el Observatorio de Restitución y Regulación de los Derechos de Propiedad Agraria. Entre sus publicaciones se encuentan: la reseña del libro “The Moral Economy: Why Good Incentives are no substitute for good citizens” en la revista Estudios Sociojurídicos y, en coautoría, el artículo  “Land Tenure Systems and Property Rights: Socio-Legal Studies in the Colombian Case” en la revista Tilburg Law Review.

Listado de ilustraciones y tablas

 

 

 

 

Ilustración 1.  Primer trapiche del ingenio Pichichí

Ilustración 2.  Capilla del ingenio Pichichí

Ilustración 3.  Foto de un calambuco

 

Tabla 1.  Ingenios de la industria azucarera

Tabla 2.  Ingenio El Centenario. Cantidad de trabajadores

Tabla 3.  Ingenio El Centenario. Tipo de contratación

Tabla 4.  Ingenio El Centenario. Trabajadores discriminados por sexo

Tabla 5.  Ingenio El Dorado. Cantidad de trabajadores

Tabla 6.  Ingenio El Dorado. Trabajadores discriminados por sexo

Tabla 7.  Entrevistas a profundidad

Tabla 8.  Índice comentado

Tabla 9.  Ingenios y empresas de corte

Tabla 10. Ingenios, empresas de corte y sindicatos

Índice de abreviaturas

 

 

 

 

ARL

Administradora de riesgos laborales

BID

Banco Interamericano de Desarrollo

Cepal

Comisión Económica para América Latina y el Caribe

Ciamsa

Comercializadora Internacional de Azúcares y Mieles

CGT

Confederación General del Trabajo

CSR

Corporate social responsibility

CTA

Cooperativas de trabajo asociado

CTC

Confederación de Trabajadores de Colombia

CUE

Consorcio Universitario Euroamericano

CUT

Central Unitaria de Trabajadores

CVC

Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca

EAT

Empresas asociativas de trabajo

EPS

Entidad prestadora de salud

Fedetev

Federación de Trabajadores del Valle

GRI

Global Reporting Initiative

KMPG

Klynveld Peat Marwick Goerdeler

MME

Ministerio de Minas y Energía

OIT

Organización Internacional del Trabajo

ONG

Organización no gubernamental

ONU

Organización de las Naciones Unidas

RSE

Responsabilidad social empresarial

SAS

Sociedades anónimas simplificadas

SENA

Servicio Nacional de Aprendizaje

TLC

Tratado de Libre Comercio

A Stellita y Gustavo

Introducción
El Valle del Cauca y la agroindustria de la caña de azúcar

 

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Entre los cañaduzales

Fotografía de Luz Stella Nicholls Ramírez

 

Durante la primera década de los 2000 la industria azucarera colombiana se vio marcada por dos grandes ­conflictos laborales protagonizados por los corteros de caña de azúcar. Los paros del 2005 y del 2008 cambiaron no solo la vida de los trabajadores y sus familias, sino también la de la industria azucarera en general. Después de estos conflictos obrero-patronales, los ingenios se adhirieron al Pacto Global y comenzaron a reportar anualmente sus actividades a través de la metodología del Global Reporting Initiative —GRI1 para hacer frente a las críticas de la sociedad civil y a la publicidad negativa. Esto implicó que la búsqueda de alternativas para superar la crisis se caracterizara por el abandono de los canales existentes para resolución de conflictos y la adopción de propuestas de responsabilidad social empresarial —RSE—. Es decir, el predominio de prácticas paternalistas manejadas por las oficinas de relaciones industriales o recursos humanos que, según Valero (2013), se caracterizaban por generar soluciones particulares basadas en la construcción de vivienda y educación de los trabajadores y sus hijos, se reestructuraron y comenzaron a manejarse con criterios “técnicos” que diferencian los tipos de apoyo según la relación que mantienen los grupos afectados con la empresa.

La industria azucarera actual tiene como antecedente la aparición de los trapiches y la molienda de la caña en la hacienda La Rita, donde Santiago Eder inició un cultivo cafetero y, más tarde, fundó el ingenio Manuelita hacia 1901. Después de la instalación del ingenio Manuelita en el Valle del Cauca, la construcción del ferrocarril del Pacífico y el Canal de Panamá, se generaron las condiciones para que aparecieran más ingenios en la región (Rojas, 2017).

Actualmente la industria azucarera está integrada por catorce ingenios, que para el 2000 empleaban de forma directa a 28 018 personas, 12 000 menos que en 1980 (Centro Nacional de Productividad, Naciones Unidas y Unidad de Desarrollo Industrial y Tecnológico, 2002). Los datos de la ONU y la Cepal, lastimosamente, no permiten analizar si la disminución de 12 000 puestos de trabajo fue ocasionada por procesos de tercerización laboral o por la reducción de los puestos de trabajo en la industria. Los catorce ingenios disponen de 238 204 hectáreas cultivadas de caña de azúcar; el 25 % de los terrenos les pertenece y el otro 75 % es de 2750 proveedores de caña.2 De ese total, doce3 están asociados en Asocaña y principalmente producen azúcar, mieles y sus derivados, bioetanol y cogeneran energía eléctrica.4 En la tabla 1 se encuentra una breve reseña de cada uno de los ingenios.

Además del proceso de instalación de los ingenios, según Rojas (2017), hacia la segunda mitad del siglo XX la industria azucarera se consolidó con la constitución de varias entidades gremiales. La primera fue Asocaña en 1959 que hoy agrupa a casi todos los ingenios; tiene como objetivo fortalecer el poder de negociación de sus asociados con el Estado y empresas en el ámbito internacional. En 1961 se constituyó la Comercializadora Internacional de Azúcares y Mieles —Ciamsa— encargada de coordinar las exportaciones y las importaciones de la industria azucarera colombiana. Después, en 1973, los cultivadoresde caña se asociaron a través de Procaña, una entidad de carácter gremial, sin ánimo de lucro, que ejerce la representación de las personas naturales o jurídicas que cultivan caña de azúcar (Procaña, s. f.).

En 1977 se creó Tecnicaña, agremiación de los profesionales y los técnicos del sector. En el mismo año, y por iniciativa de Asocaña, se estableció Cenicaña, una corporación privada, sin ánimo de lucro, que tiene por objetivo realizar asesorías técnicas y científicas para el cultivo de caña de azúcar. Esta entidad está encargada tanto de desarrollar nuevas variedades de caña más productivas, más precoces en su cosecha y más resistentes a las enfermedades, como del control de plagas y enfermedades, el análisis de los suelos, entre otros (Rojas, 2017).

 

Tabla 1. Ingenios de la industria azucarera

Ingenio

(Municipio)

Año de

fundación

Objeto de la empresa

Informes de sostenibilidad anuales

Planta de empleados

Sindicatos

Manuelita

(Palmira)

1901

Producción de azúcares y mieles.

Producción de bioetanol.

Cogeneración de energía eléctrica.

Desde el 2010 se suscribió al Pacto Global. Tiene reportes bianuales desde el 2012 siguiendo la metodología GRI.

Entre colaboradores directos e indirectos había 9325 en el 2016.

Sintracañalvalc

Sintracatorce

Sintraicañazucol

Providencia

(El Cerrito)

1926

Producción de azúcares y mieles.

Producción de bioetanol.

Cogeneración de energía eléctrica.

No hace parte del Pacto Global. Genera reportes bianuales desde el 2010 siguiendo la metodología del GRI.

En el 2017 generaba 3160 empleos.

Sintraicañazucol

Riopaila-Castilla

La unión de ambos ingenios

(La Paila y Pradera)

1928

1945

2007

Producción de azúcares y mieles.

Producción de bioetanol.

Cogeneración de energía eléctrica.

Reportes anuales de sostenibilidad desde el 2010 siguiendo la metodología del GRI.

En el 2017 había 2462 personas contratadas.

Sintrariopaila

Sintracastilla

Sintraindulce

Sintrainagro

Sintracorvalc

Sintracorteros

María Luisa

(Candelaria y Florida)

1930

Producción de azúcar y derivados.

Desde el 2009 se adhirió al Pacto Global y desde el 2011 presenta informes de sostenibilidad siguiendo la metodología del GRI.

En el 2012 tenía 306 personas vinculadas laboralmente (Asocaña, 2012).

Sintrainagro

Mayagüez

(Candelaria)

1937

Producción de azúcares y mieles.

Producción de bioetanol.

Cogeneración de energía eléctrica.

Desde el 2011 presenta informes de sostenibilidad siguiendo la metodología del Pacto Global y el GRI.

En el 2015 tenía 1994 empleados directos y temporales.

Sintraindulce

Sintrainagro

Sintraicañazucol

Pichichí

(Guacarí)

1941

Producción de azúcares y mieles.

Desde el 2010 se adhirió al Pacto Global y presenta informes de sostenibilidad basados en la metodología del GRI.

En diferentes modalidades de contratación tenía 706 empleados en el 2015.

Sintrapichichí

Sintracatorce

Sintraicañazucol

Carmelita

1945

Producción de azúcar y derivados.

No hay información disponible en páginas web.

En la última convención colectiva en el 2016 con Sintracarmelita reportó 530 trabajadores afiliados.

Sintracarmelita

Sintraicañazucol

San Carlos

(Tuluá)

1945

Producción de azúcares y mieles.

No está en el Pacto Global, pero tiene un informe del 2016.

Para el 2016 había 964 trabajadores directos, 37 estudiantes del SENA y 11 practicantes universitarios.

Sintrasancarlos

Central Tumaco

1950-2017

Producción de azúcares y mieles.

Este ingenio cerró sus puertas en el 2017 y no hay información disponible sobre prácticas de RSE en páginas web.

Este ingenio cerró sus puertas en el 2017 y no hay información disponible sobre la cantidad de trabajadores que empleaba.

Sintraicañazucol

La Cabaña

(Puerto Tejada)

1956

Producción de azúcares y mieles.

Cogeneración de energía eléctrica.

Desde el 2011 presenta informes de sostenibilidad siguiendo la metodología del Pacto Global y el GRI.

En el 2011 tenía 1700 personas afiliadas y 1500 contratistas.

Sintrainagro

Risaralda

(Balboa, Risaralda)

1970

Producción de azúcares y mieles.

Producción de bioetanol.

Cogeneración de energía eléctrica.

Hace parte del Pacto Global desde el 2008 y sus informes de sostenibilidad se basan en la metodología del GRI.

Para el 2015 había 488 empleados directos y 2303 “unidades externas de apoyo”.

Sintraidubar

Sintraicañazucol

Sintrainagro

Incauca

(El Ortigal, Cauca)

1963

Producción de azúcares y mieles.

Producción de bioetanol.

Metodología GRI.

En el 2015 tenía 1817 trabajadores.

Sin datos

Trapiche Lucerna

2000

Producción de azúcares y mieles.

Cogeneración de energía eléctrica.

Sin datos

En el 2017 empleaba 270 personas directamemte e indirectamente a 750.

Sin datos

Ingenio de Occidente

2013

Producción de miel virgen.

Sin datos

Sin datos

Sin datos

Fuente: Informes de sostenibilidad de los ingenios (UN Global Compact, 2011; Asocaña, 2012; El Centenario, 2011, 2012, 2013, 2014, 2015; El Dorado, 2010, 2011, 2012, 2013, 2014, 2015; La Cabaña, 2011; Manuelita, 2016)

 

Este complejo empresarial ha sido determinante en el desarrollo de la industria y la población vallecaucana.

La industria está ubicada en el valle geográfico del río Cauca, región que comprende el norte del departamento del Cauca, la cuenca que atraviesa el Valle del Cauca y el sur del departamento de Risaralda. Debido a la variedad de las regiones y las diferentes características de sus suelos, presentan rendimientos diferenciados. Por ejemplo, en el norte del Cauca se produce “entre 90 a 100 toneladas de caña por hectárea a diferencia de las zonas de acá del Valle del Cauca, que son más privilegiados, donde los promedios están entre 120 y 140 toneladas por hectárea” (Andrés Castro, presidente de un sindicato de industria, 21 de julio del 2015). Los salarios de los corteros dependen de la rentabilidad de la zona en la que trabajan.

A mediados del siglo pasado, el personal dedicado al corte de caña y sus familias, muchos de ellos afrodescendientes provenientes del Pacífico, vivían en condiciones poco dignas en campamentos construidos por los ingenios. Durante el crecimiento de la industria, las empresas transportaban a los corteros desde y hasta sus casas y a las plantaciones de caña hacinados en camiones. La jornada iniciaba con la aurora y terminaba al caer la tarde. Los calambucos originales, vagones o carcasas de bus remolcadas por un tractor, han sido reemplazados por buses comunes donde los transportan hoy en día. Eran duras condiciones de vida, como dura ha sido su labor.

Hasta los años noventa los ingenios azucareros albergaban en su interior centros poblados. Por ejemplo, en El Dorado5 vivían el dueño y su familia, los trabajadores y los empleados junto con sus familias, las monjas y el padre. La fábrica de procesamiento de azúcar compartía el terreno con una pequeña escuela, la capilla, el barrio, el teatro y un par de casinos (uno para ejecutivos y otro para trabajadores). Con la muerte del fundador, la situación cambió, muchos de aquellos trabajadores que vivían allí se han ido jubilando y se mudaron a ciudades cercanas al ingenio. Aunque no es una práctica común, hoy siguen viviendo en el ingenio algunos empleados.

A pesar de algunos cambios sustanciales en la calidad de vida de los corteros, hoy en día las dificultades asociadas a un trabajo precario han mutado con lo que Basualdo y Morales (2014) definen como tercerización laboral y fragmentación del conjunto de trabajadores. Desde la década del 2000, en los ingenios estudiados, comenzó un proceso de subcontratación que incluía a contratistas, cooperativas de trabajo asociado —CTA—, empresas asociativas de trabajo —EAT— y contratos sindicales (Lasso-Ortega 2015; MME y BID, 2012; Urrea Giraldo, 2010; Pérez y Álvarez, 2009; Aricarpa, 2006), que con la firma del TLC con Estados Unidos terminó en la creación de empresas de corte por fuera de los ingenios para la contratación de los corteros. Paralelamente, y en respuesta a los conflictos obrero-patronales de la década pasada, se pasó de modelos paternalistas de relación con los trabajadores y la comunidad a programas de RSE de tipo tecnocrático, en los cuales los beneficios “extrasalariales” tampoco se reconocen como derechos que los trabajadores pueden reclamar si se los quitan.

La adscripción de los ingenios al Pacto Global implicó la revisión de antiguas ayudas sociales personalizadas y arbitrarias manejadas por el patrón y la Iglesia, la instalación de nuevas áreas de bienestar social al interior de los ingenios y la consecuente reorganización de la relación de los ingenios, con colaboradores, proveedores, accionistas y la comunidad.6 Al mismo tiempo, los ingenios desarrollaron procesos de comunicación regulares y sistemáticos dirigidos a la comunidad nacional e internacional sobre los resultados de dichos programas. Así, los ingenios se blindan de las críticas frente a la situación laboral de los corteros, y evaden legislaciones y controles más rigurosos por parte del Estado. De hecho, los nuevos programas asistenciales de RSE han ayudado a relegitimar la presencia de la agroindustria en esta región. Los ingenios han logrado reinventar su buena imagen a través de la inversión en educación, y han reelaborado la imagen de “buen vecino” que fortalece su presencia en la región y, por tanto, dificulta los cuestionamientos. Según Vanegas Muñoz y Rojas (2012), las empresas cumplen un rol de benefactores “en lugares en los que la presencia del Estado ha sido históricamente escasa y en los que los empresarios no siempre mostraron su cara amable” (2012, p. 29).

Al igual que las antiguas prácticas paternalistas, el uso de modelos de RSE desplaza la disputa por mejores condiciones de vida y de trabajo a un terreno despolitizado (Sydow, 2016), donde los conflictos entre las empresas y los actores de interés (stakeholders) se gestionan por medio de formularios y procedimientos previamente pautados que no dan lugar a la protesta o la confrontación abierta. A su vez, la distinción de la asistencia según formas de contratación y de relación con la empresa obstaculiza la convergencia de las demandas de los trabajadores —directos e indirectos— y de la comunidad.

En este marco, el presente trabajo responde a la pregunta: ¿cómo opera la RSE en un contexto de altos niveles de tercerización laboral? A diferencia de los procesos de despolitización observados en otros contextos (Sydow, 2016), en este caso se observa que algunos trabajadores y la sociedad civil lograron resignificar la RSE como una nueva arena de disputa en la cual tramitan, al menos de manera parcial, sus demandas por mejores condiciones de vida y trabajo.

En este sentido, se desarrollan los conceptos teóricos de responsabilidad social empresarial y tercerización laboral para el desarrollo del presente trabajo; se muestran los estudios previos sobre la industria azucarera en la región a fin de ubicar los aportes de esta investigación desde el campo de la sociología, y se exponen los métodos y las técnicas utilizados. Luego se desarrollan tres capítulos y las conclusiones.